Sé que tuvimos miedo, sé que hay indignación y sé que muchas veces parece que no hay justicia. No podemos ni vamos a permitir que esto siga sucediendo.
No vamos a tolerar que haya feminicidas en las calles, pero tampoco vamos a tolerar ni un solo acto de violencia contra ninguna mujer, por mínimo que este sea. Esa es la instrucción que he girado a la Dirección de Seguridad Pública de Ensenada.
Insisto, hay errores, y no los vamos a ocultar ni a justificar. Pero también hay aciertos, y este es uno de ellos. Quiero que sepan que como Presidenta voy a velar porque los errores se corrijan y porque los aciertos y los resultados se sigan dando, por el bien de todas y todos.
A todas las mujeres de Ensenada: NO ESTÁN SOLAS. No podemos borrar el dolor de quienes han sido lastimadas, y mucho menos borrar la memoria de quienes no están, pero sí podemos garantizarles que estamos aquí, que seguimos en la lucha y que vamos a combatir con toda la firmeza de la ley a quienes atenten contra su seguridad.
Este es un caso que debe marcar un precedente. La violencia contra las mujeres no la voy tolerar, y quienes la ejerzan, enfrentarán consecuencias.
Estaré al pendiente de que esto no siga sucediendo y de que este hombre asuma su responsabilidad por los hechos cometidos.
La justicia y el orden tiene que prevalecer, y yo estaré aquí, firme, buscando que así sea.
